Premiar a tu perro con un hueso es una excelente idea. Sin embargo, existen ciertos tipos de huesos que ponen su vida en riesgo. ¡Descubre cuales evitar!
Los perros aman los huesos. Si alguna vez le has dado uno al tuyo, seguramente habrás notado cómo pasa mucho tiempo lamiéndolo y mordiéndolo. Un hueso no sólo lo mantiene ocupado por un buen rato, también ayuda a limpiar sus dientes, mejorar el aliento y aliviar el dolor de encías por el cambio de dientes (en caso de los cachorros).
Sin embargo, se ha encontrado que ciertos huesos no son buenos para los perros. Al astillarse fácilmente pueden perforar el estómago o el intestino de tu canino. Es importante saber elegir los indicados.
Recuerda: Los huesos no deben sustituir a su alimento diario. Por el contrario, deben ser otorgados en contadas ocasiones y como un detalle especial.
¿Y a todo esto con qué hueso debo premiar a mi perro?
Elegir el mejor hueso natural para tu perro es más sencillo de lo que piensas: jamás debe ser de pollo, pues son muy flexibles y es más fácil que se astillen. Una vez dicho eso, fíjate en lo siguiente:
- De ser un hueso grande.
- Sus bordes deben estar redondeados.
- Debe ser de res.
- Las áreas de los nudillos son más suaves y no lastiman sus dientes.
Toma en cuenta que existen a la venta huesos naturales que son ideales para tu perro, pues cuidan cada detalle que te mencionamos, además de que cuentan con la calidad necesaria para evitar una parasitosis.
En Hundsport contamos con la variedad de huesos que tu canino merece, para ese momento especial, el premio que merece tras un buen entrenamiento o cuando gane alguna competencia. Puedes ver los huesos que tenemos disponibles
aquí.